viernes, 22 de octubre de 2010

CUIDADO CON HALLOWEEN

 El 31de octubre es una fecha asociada con los muertos, las almas, las brujas y sus hechizos, debido a su cercanía con el día de todos los santos (o dia de los difuntos), que se celebra a principios del mes de noviembre.
En realidad, muchos escritores coinciden en que Halloween era la festividad principal de los Celtas. Hace miles de años, desde antes de la venida de nuestro Señor, los Celtas vivían en lo que ahora conocemos como la Gran Bretaña, y celebraban el año nuevo el 1 de noviembre. En la víspera, durante la noche del 31 de octubre, se reunía toda la gente del poblado, se encendían hogueras, y se disfrazaban con las pieles de los animales sacrificados, como forma de ahuyentar a las brujas y a los espíritus malignos; pues resulta que los Celtas creían que los muertos volvían en la noche de Samhain, caballero y señor de la muerte, los cuales se comunicaban con los vivos y les pedían alimentos. Y en el caso de que no alcanzaban sus peticiones, maldecían y hacían víctimas de sus conjuros a los pueblerinos asustados. De ahí viene la costumbre de pedir dulces y golosinas en la noche de Halloween. "O me das o te hago una travesura" ("Trick or Treat"). Toda esa historia ha generado muchas leyendas.

La fiesta llegó a Estados Unidos a través de pequeñas comunidades de irlandeses católicos a mediados del siglo XIX y se expandió la tradición por el resto del mundo, y a Chile llegó a principios de los años 50, traída por los norteamericanos que explotaban las minas de cobre en Chuquicamata y Rancagua.  Lentamente, a partir de los 60 fue expandiéndose dentro de la sociedad chilena, tímidamente en algunos barrios santiaguinos.